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Mantener una buena salud bucodental es importante para nuestra vida, ya que con ella se evitarían las enfermedades. Tales como infecciones, llagas bucales, enfermedades periodontales, caries, perdida de dientes, y otras afecciones que limitan la capacidad de morder, masticar, sonreír y hablar, así como también los posibles trastornos psicológicos que éstas pueden causar.
Los mejores 5 consejos para mantener la higiene dental
Una buena salud bucal es consecuencia de una buena higiene dental, para ello es recomendable seguir algunos consejos básicos de tu odontólogo o dentista. A continuación, te presento los más importantes que debes seguir en tu rutina diaria para que tengas resultados satisfactorios:
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Cepillar todos los días tus dientes adecuadamente
Lo ideal para mantener una buena salud bucal es cepillarse los dientes mínimos tres veces al día, después de cada comida, para así eliminar los residuos de comida entre los dientes. Esperar entre 20 a 30 minutos para cepillarse.
La relevancia de cepillarse los dientes con regularidad radica en que debemos remover la placa bacteriana que se forma de manera continua cuando ingerimos alimentos. Al acumularse, si no se remueve, deteriora la superficie dental desgastando el esmalte de nuestros dientes.
Es por ello, que es sumamente importante que el cepillado de nuestros dientes sea una rutina diaria al levantarse, después de cada comida y al acostarse.
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Tips para un buen cepillado de dientes
Para tener una correcta rutina de cepillado, es necesario tener en cuenta las siguientes recomendaciones: Utilizar una buena técnica de cepillado; así como cepillar todas las caras de los dientes durante al menos 2 minutos usando entre 1-2 cm de pasta dentífrica.
El cepillo de dientes puede ayudar a proliferar las bacterias que tenemos en nuestra boca, por tal motivo es de vital importancia reemplazar el cepillo dental cada 2 o 3 meses, o cuando estén desgastados los filamentos. El mango del cepillo debe ser ergonómico, ya que permitirá tener un mayor control y facilitará el movimiento de cepillado.
Los filamentos del cepillo de dientes deben ser redondeados y texturizados, pues permite un cepillado suave y no ocasiona daños en las encías. El número de filamentos varían entre 3 o 4 hileras para proporcionar una mayor eficacia al eliminar placa bacteriana y una mayor precisión en a la limpieza interdental.
Usar pasta dental con flúor, pues permitirá mantener unos dientes sanos y fuertes y evitar las caries de una forma efectiva. Cepilla tu lengua a la hora del cepillado para eliminar el mal aliento
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Usa enjuagues bucales
El uso de enjuague bucal es indispensable. Ayudará a proteger tus dientes durante el mayor tiempo posible contra las bacterias que puedan generar caries, combatir la gingivitis y evitar el mal aliento. Su función es complementar la labor del cepillado y aportar frescor.
Se recomienda utilizarlo 2 o 3 veces al día después del cepillado, no diluir con agua a menos que el producto lo indique, pues de lo contrario podría perder su eficacia.
El tipo de enjuague a utilizar varía en función del propósito para el cual este destinado. Puede haber enjuagues para uso diario como complemento de la rutina de higiene bucal y otros, de tipo terapéutico que solo puede emplearse en un determinado tiempo.
Es de vital importancia seguir las indicaciones del uso establecidas por el dentista o por el fabricante del producto, ya que su uso excesivo o erróneo puede ocasionar daños en nuestros dientes, lengua o mucosas orales. No es recomendable el uso en niños menores de 5 años por el riesgo de ingesta.
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Dieta balanceada
Hay que considerar que los alimentos influyen en la salud de nuestros dientes. Tener una alimentación balanceada con alimentos ricos en proteínas, frutos secos, semillas, frutas, verduras y vegetales ayudan a fortalecer y limpiar los dientes.
Disminuir y/o evitar alimentos y bebidas acidas, pues estos erosionan los dientes, así como también los alimentos salados o muy picantes pues favorecen la sequedad bucal.
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Visita al dentista regularmente
Acudir con regularidad al dentista nos genera ciertos beneficios que nos ayuda a mantener una higiene dental satisfactoria. Lo aconsejable es visitarlo al menos una vez cada seis meses, para prevenir posibles afecciones bucodentales a futuro.
